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EUR/USD: historia del eurodólar

El EUR/USD es con diferencia el par de divisas más operado del mundo. En esta página exploramos la historia de la moneda europea: por qué se creó el euro, quién lo utiliza y cómo ha ido cambiando su precio frente al dólar de EE. UU. a lo largo del tiempo, entre otros temas.

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El nacimiento del euro

El euro apareció el 1 de enero de 1999 como una moneda digital. Once países y tres estados soberanos adoptaron el euro en ese momento, estableciendo tipos de cambio fijos entre sus monedas nacionales y el euro. Estos eran:

País miembro Moneda anterior
Austria Chelín austriaco
Bélgica Franco belga
Estonia Corona estonia
Francia Franco francés
Alemania Marco alemán
Irlanda Libra irlandesa
Italia Lira italiana
Luxemburgo Franco luxemburgués
Países Bajos Florín neerlandés
Portugal Escudo portugués
España Peseta española

 

No miembros Moneda anterior
Mónaco Franco monegasco
San Marino Lira sanmarinense
Ciudad del Vaticano Lira vaticana

 

Los billetes y monedas físicas del euro no se introdujeron hasta tres años después, el 1 de enero de 2002, y los estados siguieron utilizando sus billetes anteriores hasta que comenzó el periodo de transición.

¿Por qué se introdujo el euro?

El objetivo de la introducción del euro fue la creación de una unión económica y monetaria. La primera finalidad de esta unión era la de reducir los costes y los riesgos asociados a las operaciones transfronterizas. Otros fines relacionados eran la estimulación del crecimiento económico, del empleo y de la paridad de precios en Europa.

La idea de una moneda única en Europa fue promovida durante los sesenta y los setenta, cuando la inestabilidad en el mercado de divisas era una amenaza para los acuerdos económicos más importantes de la Comunidad Económica Europea (CEE).

El grupo respondió vinculando sus monedas a una nueva unidad monetaria europea (ECU), una divisa digital cuyo valor se basaba en una cesta de monedas europeas. La convergencia de las políticas monetarias bajo este sistema conllevó muchos beneficios económicos y aumentó las posibilidades de una moneda única real.

Los primeros años del euro

Cuando se lanzó en 1999, el euro valía 1.1747 dólares estadounidenses en el mercado de forex, marcando un máximo de 1.1906 USD el primer día de negociación.

Sin embargo, el euro se depreció pronto frente al dólar, cayendo por debajo de la paridad varias veces entre 2000 y 2002.

Esto ocurrió porque la divisa era puramente digital en ese momento, cuando las monedas nacionales se vinculaban al euro con tipos de cambio fijos.

Algunas de estas monedas se depreciaron antes de que aparecieran los primeros euros físicos en 2002, lo que llevó a una depreciación del euro en consecuencia.

Gráfico histórico Euro a USD, 1 de enero de 1999 a 1 de enero de 2007

Éxito inicial

Los euros físicos se introdujeron en 2002 y las monedas nacionales fueron eliminadas. Los beneficios de una moneda única pronto fueron aparentes. Los países comenzaron a realizar más actividades comerciales entre sí, sacando provecho de la supresión del riesgo de cambio y de los costes de transacción. El resultado fue el crecimiento del PIB en toda la eurozona entre 2002 y 2007. Esto aumentó la popularidad del EUR/USD y produjo un aumento de su precio.

Los precios siguieron subiendo en la primera mitad de 2008, al mismo tiempo que EE. UU. entraba en recesión y se debilitada el dólar.

La crisis en la eurozona: 2008 a 2014

La etapa de 2008 a 2014 estuvo marcada por la crisis económica (primero en EE. UU. y luego en la eurozona), y causó estragos en el precio del EUR/USD.

Hubo recesión en EE. UU. desde diciembre de 2007 hasta junio de 2009, como resultado de la crisis de las hipotecas subprime. Esto hizo que el EUR/USD subiera, llegando al máximo histórico de 1.60 el 13 de julio de 2008 y como resultado de los recortes en la tasa de interés de fondos federales y del aumento de la demanda de euros.

Desafortunadamente, los efectos de la recesión en EE. UU. pronto se extendieron a otros países. Varios bancos europeos tuvieron que ser rescatados, mientras que otros fueron obligados a pagar las deudas que no pudieron ser refinanciadas en mercados globales no líquidos. La crisis hizo que la zona euro entrara también en recesión en la segunda mitad del 2008 y el EUR/USD cayó a 1.26 el 17 de noviembre de 2008.

Gráfico histórico Euro a USD, 1 de enero de 2008 a 31 de diciembre de 2014

La crisis de deuda en la zona euro

El EUR/USD se había recuperado parcialmente de los efectos de la recesión de 2008 a finales de 2009, es decir, hasta que se reveló que Grecia había estado utilizando técnicas de contabilidad creativa para esconder sus niveles reales de deuda, y eludiendo así las estrictas normas impuestas por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE.

De hecho, Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y España (PIIGS) tenían sobreapalancamiento, como resultado de la crisis financiera o, en algunos casos, de una pobre política fiscal. Esto socavó la confianza en la eurozona y los inversores comenzaron a vender sus bonos en los países afectados para invertir en divisas de otros lugares. En consecuencia, el EUR/USD cayó a 1.20 el 5 de junio de 2010.

El Banco Central Europeo (BCE) no fue capaz de responder rápido porque sabían que cualquier acción que tomaran afectaría a toda la eurozona. Además, también había poco entusiasmo en torno a la idea de que los países más prósperos vieran crecer sus propios niveles de deuda (o tasas impositivas) para financiar los rescates.

Varios organismos internacionales, como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el BCE, gastaron más de 544 billones de euros en los años posteriores a 2009 para lidiar con la crisis de deuda. Para ello se necesitó que ciertos países aceptaran estrictas medidas de austeridad que terminaron por obstaculizar el crecimiento económico en Grecia, Italia o España.

Estas medidas ayudaron a mejorar la situación de la zona euro pero la frágil confianza del inversor afectó al EUR/USD. Entre 2009 y 2014, el par experimentó grandes movimientos de precio en respuesta a noticias políticas y económicas, como los ajustes de tipos de interés a ambos lados del Atlántico, la inestabilidad política en Grecia y los temores en torno a Ucrania.

El euro hoy

Desde 2015, la economía estadounidense se ha fortalecido en relación con la europea, lo que llevó a una divergencia en política monetaria. Mientras que la FED se inclinó por aumentar los tipos de interés en respuesta a un fortalecimiento de la economía, el BCE tuvo que mantener tipos de interés bajos e introducir un programa de expansión cuantitativa para impulsar el gasto en Europa. Esto mantuvo el precio del EUR/USD relativamente bajo, al menos en comparación con el que había a principios de 2014.

El euro también se ha visto sacudido por la incertidumbre política y económica en los últimos años. Reino Unido votó a favor de salir de la UE el 23 de junio de 2016, haciendo caer al EUR/USD - de 1.14 en el día del referéndum a 1.11 el día después. La incertidumbre alrededor del acuerdo final del Brexit aún continúa afectando al precio del euro, ya que no se espera que Reino Unido abandone la UE hasta marzo de 2019. Es probable que un Brexit estricto (hard Brexit, sin acuerdos) tenga un impacto negativo sobre el euro, mientras que un Brexit flexible (soft Brexit, en el que el Reino Unido y la UE mantendrían vínculos estrechos) podría limitar el impacto o incluso hacer que el euro se fortalezca.

La popularidad de los partidos euroescépticos también ha crecido en el continente, contribuyendo a extender el temor de que otros países sigan el ejemplo de Reino Unido. Estos temores han sido en su mayoría apaciguados por los resultados electorales en 2017, que daban victoria a políticos proeuropeos, como Emmanuel Macron (Francia), Angela Merkel (Alemania) o Mark Rutte (Países Bajos). Sin embargo, el futuro de la UE y del euro aún resulta incierto. Cataluña trató de acercarse a su independencia de España con un referéndum ilegal en septiembre de 2017 y aún estamos a la espera del acuerdo final del Brexit.

Gráfico histórico Euro a USD, 1 de enero de 2015 a 8 de noviembre de 2017

¿Qué países usan el euro?

Diecinueve de los 28 países de la Unión Europea usan el euro como su moneda oficial.* Si lo comparamos con los 11 de 15 cuando el euro fue lanzado en 1999, percibimos el crecimiento de la UE desde entonces.

Seis países no miembro usan también el euro, aunque solo cuatro de ellos (Andorra, Mónaco, San Marino y Ciudad del Vaticano) se unieron con la aprobación de la UE. Los otros dos (Kosovo y Montenegro) no son parte de la eurozona y utilizan la moneda sin permiso formal.*

¿Qué países de la UE no usan el euro?

Nueve países miembro de la UE no usan actualmente el euro.* Estos son Bulgaria, Croacia, República Checa, Dinamarca, Hungría, Polonia, Rumanía, Suecia y el Reino Unido

Se espera que estos países, con excepción de Dinamarca y Reino Unido, se unan al euro en algún momento, a la espera de que cumplan ciertos requisitos. Cualquier país que se una a la UE en el futuro tendrá que unirse también a la moneda única.

Reino Unido y Dinamarca, sin embargo, ya eran miembros de la UE cuando la moneda fue lanzada y pudieron negociar sus cláusulas de exclusión. Esto significa que solo ellos están exentos de la obligación de unirse al euro.

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* En el momento en que se escribió este texto (8 de noviembre de 2017).

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