En colaboración con el Dr. Robert Hancké de la Escuela de Economía de Londres, IG, el proveedor de divisas retail ha considerado...
Región disidente Puerto Rico
País perteneciente Estados Unidos
Moneda anterior Dólar estadounidense (USD)
Moneda nueva Nuevo peso puertorriqueño
La economía de Puerto Rico está en una crisis causada por las enormes deudas del país. ¿El establecimiento de una nueva moneda ayudaría a la isla a ponerse de pie o simplemente aumentaría sus problemas?
Una moneda más suave permitiría la estabilización macroeconómica y una tasa de cambio más competitiva.
Es probable que la tasa de cambio deba ser monitoreada de cerca por un banco central independiente o caja de conversión recientemente establecida para evitar la inflación importada.
Esto podría destruir las ganancias de independencia monetaria.
Económicamente, es probable que haya muy poco impacto.
Puerto Rico es una parte demasiado pequeña de los EE. UU. para tener un gran impacto en la economía estadounidense.
Algunas multinacionales podrían trasladarse a los Estados Unidos continental, pero ese proceso ha estado sucediendo durante varias décadas de todos modos.
Cambio en el valor del dólar estadounidense (USD) desde 2000, basado en DEG por unidad monetaria. Fuente
Dr. Robert Hancké
“Puerto Rico debería desarrollar otros instrumentos para abordar su principal problema, la falta de crecimiento económico.”
Puerto Rico probablemente resolverá instantáneamente su estatus político como país independiente ya que es poco probable que Estados Unidos acepte un nuevo estado que use una moneda distinta al dólar.
El partido político principal más débil (el Partido Independentista Puertorriqueño, que actualmente obtiene menos del 5% de los votos) habría logrado sus objetivos políticos, posiblemente en contra de los deseos de la gran mayoría de los votantes.
Esto podría conducir a la inestabilidad política e incluso a la violencia.
Cualquier beneficio político y económico sería muy pequeño.
Tampoco está claro si las instituciones de Puerto Rico son lo suficientemente fuertes como para manejar una moneda independiente.
